Columna de Natalia Madrid, profesora del Departamento de Ingeniería Comercial.
La logística, como motor esencial en la cadena de suministro, ha sido testigo de una transformación sin precedentes gracias a la llegada de la industria 4.0. En este escenario de innovación tecnológica, las mujeres están desempeñando un papel cada vez más vital en la adopción y aplicación de tecnología avanzada, liderando así un camino hacia la logística más eficiente, conectada y sostenible.
La participación activa de las mujeres en roles tradicionalmente dominados por hombres ha aumentado cada vez más. Según la última encuesta Women In Supply Chain 2022, las mujeres representan casi un 39% de la ocupación de todo el rubro logístico, superando así desafíos de género, permitiendo que se destaquen en áreas como la gestión de datos, análisis predictivos y toma de decisiones basadas en tecnología.
Casos de estudio destacan a mujeres líderes que han impulsado la implementación de tecnología disruptiva, desde la introducción de sistemas de gestión de almacenes basados en inteligencia artificial, hasta la optimización de rutas mediante algoritmos avanzados. También encontramos los casos de mujeres emprendedoras que están creando soluciones tecnológicas desde cero, abordando problemas específicos, como es el caso de Fernanda Palacios, en la startup SubCargo, que busca democratizar el transporte de carga, resolviendo el problema de digitalización de la industria, introduciendo así innovación significativa, pero también inspiran a próximas generaciones de mujeres a explorar nuevas carreras.
Pero aún queda mucha brecha que resolver. Encontramos también data como el análisis realizado por la Fundación Conecta Logística con SII, donde la participación de mujeres solo alcanza el 17%, o en el caso portuario, donde las mujeres representan solo un 13% del total de la fuerza laboral. Y es acá donde podemos encontrar oportunidades para seguir avanzando, potenciando los programas de capacitación, y desarrollo de habilidades que puedan empoderar y generar un liderazgo en la adopción de tecnologías de la industria 4.0, desde cursos especializados hasta mentorías, cerrando la brecha de habilidades y promoviendo la participación activa, porque esto no es solo una cuestión de igualdad, sino que es una estrategia inteligente para garantizar que las soluciones sean inclusivas y respondan a diversas perspectivas y necesidades.
Un gran esfuerzo están haciendo organizaciones como WINLOG, que permite visibilizar y conectar a mujeres profesionales del área logística en alianza con diversas organizaciones, o como Her Global Impact que prepara e integra al talento femenino en la era digital, ya que esta evolución no es natural, sino una revolución que requiere de la participación de todos los actores involucrados, donde la igualdad de género y la eficiencia tecnológica deben ir de la mano.