La presentación, a cargo de alumnos del curso Taller de Productos 2 de Campus San Joaquín, responde al trabajo colaborativo entre la entidad y el Departamento de Ingeniería en Diseño de la USM.
En el marco del trabajo colaborativo entre Museo Taller y el Departamento de Ingeniería en Diseño de la Universidad Técnica Federico Santa María, los estudiantes de la asignatura Taller de Productos 2 de Campus San Joaquín dieron a conocer sus proyectos en las dependencias de la entidad, ubicada en la comuna de Santiago.
Museo Taller es un espacio cultural y educativo de fomento a los oficios manuales, que se ha propuesto el desafío de aportar al mundo de la enseñanza a través de proyectos que incentiven el desarrollo del pensamiento y el aprender haciendo, desarrollando recursos educativos para diferentes asignaturas y niveles escolares.
En este contexto, Museo Taller planteó un desafío a los alumnos de IDP: ¿cómo trabajar la educación STEAM a través de la lutería y la cerámica? Con esta pregunta como guía, los estudiantes desarrollaron a lo largo del segundo semestre una experiencia de aprendizaje dirigida a escolares de sexto y séptimo básico, cuyas soluciones finales debían contemplar el desarrollo de un producto pedagógico y el diseño de la actividad en sí.
Según cuenta la académica del Departamento de Ingeniería en Diseño y encargada del curso, Melissa Pozatti, “en agosto, al inicio del proyecto, visitamos Museo Taller para que los alumnos y alumnas pudieran conocer y observar el espacio, conversar con el equipo y hacerles preguntas relacionadas con los requerimientos del proyecto. Al final del semestre coordinamos una fecha para presentarles los resultados finales en su propio espacio, con el propósito de que el equipo del museo pudiese estar presente y dar a los y las estudiantes su feedback sobre los proyectos”.
Compromiso y motivación
Para la académica de la USM, “fue un proyecto bastante desafiante para los estudiantes, ya que implicaba una serie de variables que debían considerarse, como usuarios distintos y temáticas complejas, que además eran nuevas para los alumnos, como el proceso de enseñanza – aprendizaje y los oficios de cerámica y lutería”.
Para poder desarrollar adecuadamente sus propuestas, cada equipo realizó una investigación inicial profunda, que contempló el estudio de las bases curriculares y planes de estudio del ministerio de Educación, así como entrevistas a profesores de educación básica, lutieres y ceramistas.
“Los equipos alcanzaron excelentes resultados, entregando propuestas de soluciones completas e innovadoras, lo que fue corroborado por los comentarios del personal del museo al momento de la presentación. Además, la dedicación de los alumnos fue genial, ya que presentaron sus proyectos de manera muy profesional y comprometida”, comentó Pozatti.
La académica agregó que “creo que tener la posibilidad de poder trabajar con clientes y sus demandas reales genera una mayor motivación y compromiso de parte de los estudiantes, sobre todo cuando pueden tener una retroalimentación directa. Agradezco a Museo Taller y su equipo por la oportunidad que nos brindaron y su disposición a ayudar en la fabricación de los productos y el testeo de los proyectos a mayor escala en el espacio del museo. Estoy segura que muchos de los proyectos desarrollados en el marco de la asignatura seguirán delante de forma independiente y que surgirán nuevos proyectos de colaboración en los próximos meses”, afirmó.
