Organizado por la Dirección General de Vinculación con el Medio, se trató de un espacio de debate en torno a esta problemática y sus efectos tanto en el ser humano como en el medioambiente.
Abordar desde distintas disciplinas la problemática de la escasez hídrica fue el objetivo del coloquio “Seguridad hídrica, bienestar humano y medioambiente”, realizado por la Dirección General de Vinculación con el Medio de la Universidad Técnica Federico Santa María. La actividad reunió a expositores tanto de la USM como de otras instituciones, quienes compartieron el estado de sus proyectos en áreas tan diversas como el diseño de viviendas sociales, la implementación de plantas desaladoras o la reutilización de aguas grises.
De acuerdo con Nina Hormazábal, Directora de Vinculación con el Medio del Campus Casa Central Valparaíso, se trató de “un espacio para debatir y abrir una plataforma donde nuestros investigadores -ya sea realicen investigación científica, práctica, docente o de estudiantes- pudieran tener un podio para plantear lo que están trabajando en torno a este tema, con el fin de conocer qué se está haciendo desde las distintas unidades de la universidad. Es una confluencia de actores que vienen de un espectro lo más amplio posible, para abrir esta discusión que nos compete a todos”.
Además, explicó que el encuentro se realizó en el marco del proyecto FSM2395 que ejecuta la casa de estudios, orientado a apoyar comunidades escolares en zonas rurales de la región de Valparaíso para abordar la escasez hídrica con soluciones de tecnología e innovación.
Acción colaborativa
Durante dos jornadas los expositores ofrecieron una mirada transversal del problema, abordando distintas aristas desde sus respectivas especialidades. Así, estudiantes, doctorandos, profesores, académicos e investigadores dieron a conocer su quehacer en tópicos como la implementación de plantas desaladoras, la búsqueda de soluciones a nivel de territorios, la calidad ambiental al interior de las aulas escolares y el tratamiento de aguas grises para diversos usos, incluyendo un sistema para mitigar incendios.
Además, en su ponencia titulada “Bee-Monitoring: Abejas en el biomonitoreo de condiciones ambientales”, la coordinadora de USM Bee Lab e investigadora del Centro de Biotecnología “Dr. Daniel Alkalay Lowitt”, Dra. Karen Yáñez, compartió su trabajo sobre la contaminación presente en la cera de estos insectos y cómo han sido afectados por el cambio climático. Según expresó, se trata principalmente de pensar “cómo desde la ingeniería y las ciencias, que son la base de nuestra Universidad, podemos contribuir con investigación y desarrollar tecnologías”.
Los participantes también valoraron esta instancia de diálogo e intercambio de experiencias, destacando la posibilidad de replicar muchas iniciativas ya que los escenarios tienden a ser similares a nivel internacional. Por su parte, Mario Barraza, quien forma parte de la Asociación de Profesores Rurales de Chile, relevó la importancia de la acción colaborativa ya que “es sumamente delicado el tema de la escasez hídrica, de cómo mejorar la situación del agua”, y relató que, si bien en las escuelas la situación es crítica, se están ejecutando proyectos para aprovechar recursos disponibles como las napas subterráneas.
Adaptación de la infraestructura
Otro de los temas compartidos fue la construcción y su impacto tanto en el medioambiente como en el ser humano. Una de las ponencias fue “Diseño adaptable y economía circular aplicado a la vivienda social en Chile”, del candidato a Doctor en Ingeniería y Tecnología en la Pontificia Universidad Católica de Chile, Danilo Tapia, quien explicó cómo este tipo de arquitectura contribuye a reducir la emisión de gases de efecto invernadero mitigando las grandes sequías producidas por el cambio climático. “Como profesionales del rubro tenemos que pensar cómo nuestras edificaciones deben ir adaptándose; para eso tenemos que pensar en adaptar nuestra infraestructura al uso eficiente del agua y a tener una baja huella ambiental”, precisó.
En tanto, Elisa García, Doctora en Ciencias en Arquitectura y Urbanismo e investigadora del Instituto Politécnico Nacional de México, presentó “Diseño de espacios saludables en la vivienda social, desde la didáctica”. En ella compartió el caso de una zona habitacional al nororiente de Ciudad de México “que tiene esta necesidad de identificar las cuestiones del confort adaptativo que inciden mucho en la calidad de vida de las personas”. Además, destacó la relevancia de instancias como esta “porque se abordan muchas aristas no solo desde la parte arquitectónica y de materiales, sino de la parte sicológica, de la salud mental; de esa manera todos podemos abonar un poquito desde nuestra área de conocimiento y especialidad”.
Finalmente, Teresa Cuerdo, investigadora del Instituto de Ciencias de la Construcción Eduardo Torroja -parte del principal organismo de investigación en España-, en su exposición “Reflexiones actuales acerca del desafío hídrico en el Sur de Europa en un contexto de Calentamiento Global” detalló su labor evaluando cómo la emergencia climática impacta al ambiente construido, afectando el bienestar de las personas y de su entorno. “Los arquitectos tenemos una vocación social muy importante que no podemos olvidar”, advirtió, recordando también la necesidad de implementar los desarrollos científicos y tecnológicos a través de estrategias políticas, ya que “tener la investigación en un cajón no sirve para nada”.