Columna de opinión de Cecilia León, profesora del Departamento de Química y Medio Ambiente.
Todos los seres vivos necesitan reponer las energías gastadas en el quehacer diario, mantener la salud y fortalecer el crecimiento en etapas importantes de la vida, y la única forma para ello es consumiendo alimentos, necesidad básica en cualquier parte del mundo. Es así como el consumo de los alimentos debe responder a la seguridad que no nos hará daño, y que no nos veremos enfrentados a enfermedades transmitidas por los alimentos, que pueden ir de leves hasta graves y muy graves, llegando a la pérdida de la vida del consumidor.
Debemos comprender que los alimentos logran satisfacer los requerimientos nutricionales y preferencias alimentarias de las personas, contribuyendo a una vida activa y saludable.
La elaboración de alimentos inocuos es una responsabilidad tanto para la industria como para el área de servicios de alimentación, pues los consumidores confían en que el alimento no les causará ningún tipo de lesión o enfermedad.
En el año 2018, las Naciones Unidas establecieron el 7 de junio como el Día Mundial de la Inocuidad de los Alimentos, con la finalidad de sensibilizar en este tema y de mejorar los estándares de los alimentos producidos en cuanto a la calidad, entendiendo que un elemento importante de ella es la inocuidad.
En este contexto, Chile avanza constantemente en la implementación y control de la inocuidad de los alimentos, para lo cual tenemos la aplicación de las Buenas Prácticas de Manufactura, exigidas por el Reglamento Sanitario de los Alimentos, así como también la Implementación de Sistemas de Aseguramiento de la Calidad, por ejemplo, el Sistema de Análisis de Peligros y Puntos Críticos de Control (HACCP), como herramientas fundamentales, entre otras. La producción de alimentos avanza a términos mayores como es el concepto de la Cultura de Inocuidad al interior de las organizaciones, promoviendo la responsabilidad de lograr alimentos inocuos por convicción.
La inocuidad de los alimentos es un asunto de todos: gobiernos, empresas de alimentos, trabajadores, consumidores y formadores de futuros profesionales del área de alimentos.
Este año 2022 el tema para el Día Internacional de la Inocuidad de los Alimentos fue “Alimentos inocuos, mejor salud”, porque el disponer de estos alimentos resulta esencial para la salud y el bienestar de las personas. Solo cuando los alimentos son inocuos podemos aprovechar plenamente su valor nutricional y los beneficios mentales y sociales de compartir una comida segura.
En conclusión, la alimentación inocua, y con ello segura, es esencial para promover la salud y el bienestar de los consumidores, y acabar con el hambre, que son dos de los 17 principales Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU.
