Federico Meza fue el director del Concurso en América Latina y junto al equipo de programación conformado por Andrea Vásquez y Pedro Godoy, lograron que la universidad fuese anfitriona de este importante evento.
Cerca de 60 estudiantes, de 14 equipos, llegaron a las dependencias de la Universidad para ser parte de una nueva versión de la ICPC, la competencia universitaria de programación más prestigiosa y antigua del mundo, donde participan cada año más de 50 mil estudiantes en 103 países. Este año, el Departamento de Informática fue sede en Chile para la final regional, en donde compitieron equipos de universidades de todo el país, simultáneamente con otros equipos del resto de América Latina.
«La competencia se había desarrollado en forma virtual en los últimos años. Nuestra universidad ha participado desde el inicio de la competencia en Chile, y cuando se planteó la vuelta a la presencialidad, ofrecimos ser sede y fue acogido con mucho entusiasmo, pues siempre se intenta que se desarrolle fuera de Santiago. Siempre es bueno contar con una institución anfitriona que pone a disposición del evento su infraestructura, recursos, voluntarios, etc., y creo que lo hicimos muy bien», manifestó Federico Meza.
En la instancia participaron 4 equipos USM, apoyados por los profesores Diego Arroyuelo y Carlos Buil, y, al respecto, Sebastián Torrealba, estudiante de segundo año de Ingeniería Civil Informática destacó que «es muy bueno participar de esta competencia porque es una experiencia que permite conocer a gente de otras universidades, aprender de otras personas y una buena ocasión para poner a prueba los conocimientos en programación. Yo me enteré en la enseñanza media de esto porque participé de los talleres de programación de la universidad cuando iba en tercero y medio y también en la Olimpiada Chilena de informática, así que el ambiente se va manteniendo».
Los equipos tenían 5 horas para resolver la mayor cantidad de problemas, de un total de 13, resultando ganadores en Chile un equipo de la Universidad de Chile (con 6 problemas), seguido por dos de la PUC (con 5 y 4 problemas, respectivamente) y en el cuarto lugar un equipo de la USM (con 4 problemas). Por su parte, en la región que incluye al país, llamada Sudamérica/Sur con Argentina, Bolivia y Perú, los mejores equipos fueron argentinos, quedando clasificados para las World Finals un equipo de la Universidad de Buenos Aires (con la resolución de 7 problemas), un equipo de la Universidad Tecnológica Nacional Facultad Regional Santa Fe (con la resolución de 6 problemas) y un equipo de la Universidad Nacional de Córdoba (con la resolución de 6 problemas).
Un aspecto llamativo de la competencia, además de poder ver en vivo el marcador de los diferentes países, es que, con cada desafío resuelto, a los equipos se les otorgó un globo de helio, por lo que el laboratorio se va llenando de colores y celebración.
Gracias al positivo balance de la actividad, Federico Meza contó que «a futuro queremos ser una parte más activa en la organización nacional. Pedro y Andrea se integraron al equipo de organización. Queremos hacer una competencia previa, en conjunto con otros países, como una ronda de preparación para intentar aumentar el interés y la participación, y para tener más espacios de práctica».