Dos simulacros de emergencia, una jornada de salud mental y diversas capacitaciones son parte del Plan de Trabajo anual de la Unidad de Prevención de Riesgos de la Sede.
Simulacros de emergencia, capacitaciones a funcionarios y una jornada de salud emocional, son algunas de las actividades que la Dirección de Administración y Finanzas de la Sede Concepción, a través del Programa Anual de Prevención de Riesgos, ha efectuado con la finalidad de mejorar la salud y seguridad de la comunidad universitaria.
Oscar Pérez: Coordinador de Unidad de Prevención de Riesgos Institucional, destacó que las actividades han contado con la participación activa de la comunidad universitaria y que se enmarcan en un plan de trabajo anual de la Unidad. “Sede Concepción tiene un programa de trabajo junto con el IST donde se consideran simulacros, capacitaciones mensuales e inspecciones planeadas. Además, estamos en la implementación de un comité de emergencia, donde participan representantes de Dirección, recursos humanos, prevención, sindicato y comité paritario, entre otros”, recalcó.
Dentro de las actividades ya realizadas durante este año, destacan dos simulacros de emergencia en el Departamento de Química y Medio Ambiente, en que funcionarios, docentes, estudiantes y externos que se encontraban en dependencias universitarias, evacuaron hacia la zona segura asignada.
“Se efectuaron estos dos simulacros en el Departamento, en los meses de marzo y abril, logrando una excelente acogida, reactivando así nuestro plan de emergencia, revisando las fortalezas y debilidades que tenemos para lograr una mejora continua en nuestros procedimientos. Adicionalmente, tenemos programado simulacros a nivel de sede, educando así a toda la comunidad universitaria, el cómo enfrentar una emergencia de manera adecuada”, explicó Betsabé Vizcarra, Prevencionista de la Sede.
La salud mental de los trabajadores también fue considerada dentro de estas medidas, lo que se vio reflejado en la Jornada de Salud Emocional, organizada junto al IST, en que los funcionarios recibieron asesoría nutricional, disfrutaron de un masaje descontracturante y participaron en una clase de yoga, además de poder conversar con un psicólogo del Centro.
Desfibriladores externos automáticos (DEA)
Ocho desfibriladores fueron instalados en distintos sectores de la Sede, a modo de mantener provistas las dependencias ante un evento de paro cardiaco de alguna persona. Los equipos están ubicados en el pasillo de los talleres, la cafetería, el gimnasio, la Biblioteca y en el pasillo de las salas de clase.
“Se tienen programadas capacitaciones a funcionarios en su uso, a modo de tener personas preparadas para el uso de estos equipos y actuar de forma rápida ante un evento no deseado (paro cardiaco), teniendo mayor probabilidad de salvar vidas”, agregó la profesional, quien indicó que la primera de ellas ya fue realizada durante el mes de abril.