El Departamento de Arquitectura de la USM se caracteriza por la formación de profesionales con un enfoque científico-tecnológico, ampliando con ello el campo laboral y los desafíos que sus egresados pueden enfrentar.
Cada 4 de agosto nuestro país conmemora del Día Nacional del Arquitecto y Arquitecta, que se estableció en 1942 con la promulgación de la Ley 7211, que creó el Colegio de Arquitectos en Chile.
A 80 años de este hito, la disciplina arquitectónica ha sabido adaptarse a múltiples cambios, vinculados a la aparición y desarrollo de nuevas tecnologías que han permitido mejorar los parámetros de diseño y construcción, haciendo de la innovación y la sostenibilidad ejes fundamentales en la arquitectura de hoy.
Consciente de esta realidad, el Departamento de Arquitectura de la Universidad Técnica Federico Santa María cuenta con un enfoque científico-tecnológico en la formación de sus profesionales, lo que se ha convertido en un sello de los egresados de la Casa de Estudios.
Nicole Eujenio, arquitecta de la USM y docente del Departamento de Arquitectura de la Universidad, afirma que “uno de los principales motivos que diferencia a la USM en la formación de arquitectos es su enfoque vinculado a las ciencias, de carácter más ingenieril, lo que se suma a las diversas áreas de especialización que se ofrecen en el Departamento, como por ejemplo, territorio, historia, robótica y bioclimática. Esta diversidad amplía nuestro campo laboral y nos permite innovar e irnos adaptando a las nuevas tecnologías”.
¿Cuál es el principal rol de un arquitecto o arquitecta en el mundo actual?
El principal valor de un arquitecto a arquitecta es poder entregar a la sociedad espacios cada vez más confortables y habitables, mejores espacios para vivir, que es nuestra misión básica.
A esto debemos agregar que el desarrollo tecnológico potencia nuestra capacidad de ser innovadores, de entregar soluciones novedosas adaptándonos a las nuevas tecnologías existentes. Creo que este rol forma parte del perfil de un arquitecto o arquitecta de la USM, ya que el Departamento actualmente se ha asociado a la manufactura, a la robótica y a la tecnología asociada a lo computarizado, lo que permite que se abran diversas líneas de acción para los arquitectos, como por ejemplo, la realidad virtual.
¿Cómo definirías el rol social de un arquitecto o arquitecta?
Además de crear y ofrecer mejores espacios, como arquitectos debemos ser conscientes no sólo de las personas que habitarán esos lugares, sino también de todo el proceso que hay detrás, ya que no sólo hay un tema de diseño, sino también de los materiales que usamos, por qué los elegimos y de la importancia de que sean sostenibles. Cada una de nuestras elecciones conlleva un rol social.
¿Cuál es el desafío para los arquitectos y arquitectas de hoy y del futuro?
El principal desafío es ser capaces de relacionarse con diferentes disciplinas, y así encontrar nuevas áreas de desarrollo dentro del rubro de la arquitectura, y seguir descubriendo nuevas funciones en beneficio de la sociedad.
