Augusto Villanueva, alumno de Ingeniería Civil Electrónica de la Universidad Técnica Federico Santa María, compatibiliza su formación académica con su participación en los Cóndores y proyecta consolidarse en la cita mundialista.
Desde las aulas de la Universidad Técnica Federico Santa María hasta la selección nacional de rugby. Así es el camino de Augusto Villanueva, estudiante de Ingeniería Civil Electrónica que hoy vive el desafío de integrar el equipo clasificado al Mundial de Rugby 2027.
Villanueva comenzó a practicar rugby en la enseñanza básica y desde 2018 forma parte del club Old Mackayans RFC de Viña del Mar. Desde allí dio el salto a Selknam, la franquicia profesional chilena que compite en la Super Rugby Américas, lo que abrió las puertas a su primera convocatoria a la selección nacional. “Para mí fue sorpresivo, aunque se dio como el curso natural de las cosas. Mi meta es mantenerme en este nivel y llegar al Mundial de 2027”, indicó.
El estudiante sansano también ha representado a la universidad en cuatro campeonatos nacionales universitarios disputados en Valdivia, Temuco y Viña del Mar, experiencia que consolidó su vínculo entre la vida académica y deportiva. “Mis compañeros me han felicitado mucho y he sentido el apoyo de la comunidad”, comentó.
En su reflexión, Villanueva subraya el valor de compatibilizar ambas trayectorias, una exigencia que reconoce como desafiante pero posible. “Si uno se lo propone, se puede compatibilizar el estudio con el alto rendimiento”, señaló, agregando que la clave está en la disciplina diaria y en la capacidad de organizar los tiempos.
La selección de rugby de Chile, conocida como los Cóndores, ha vivido uno de sus momentos más emblemáticos en su historia reciente. A fines de septiembre de 2025 vencieron a Samoa por 31-12 en Viña del Mar y con ello sellaron su clasificación al Mundial de Rugby 2027 en Australia, convirtiéndose en el equipo número 23 que consigue su pase oficial. Esta victoria no solo aseguró el boleto, sino que también elevó considerablemente su posición en el ranking mundial: Chile ascendió al puesto 17, su mejor ubicación histórica.
El camino no fue sencillo. Durante las eliminatorias sudamericanas, los Cóndores disputaron una final contra Uruguay en la que remontaron un resultado adverso en la ida, logrando un triunfo en Montevideo por 21-18. Gracias a ese desempeño accedieron a la fase Sudamérica-Pacífico para medirse con Samoa. Con este triunfo, Chile aseguró su lugar en el torneo mundialista, consolidando su segundo paso consecutivo a una Copa del Mundo de rugby —la primera fue en 2023— y ratificando el crecimiento sostenido del rugby chileno.