Jornadas apuntan a capacitarlos en esta neurodivergencia y en su rol de agentes de cambio en este tema.
Promover acciones y fomentar el intercambio de experiencias destinadas a brindar apoyo y entendimiento a los y las estudiantes que presentan condición del espectro autista durante su permanencia en la educación superior, es el objetivo de las jornadas de capacitación sobre esta condición que la Comisión de Inclusión del Consejo de Rectores de Valparaíso, CRUV, comenzó a dictar a jóvenes de las cuatro instituciones que forman parte de este organismo, entre ellas la Universidad Técnica Federico Santa María.
La primera de las dos sesiones que considera esta actividad contó con la participación de alumnos de diversas universidades y en ella expuso la docente especializada en autismo de la Escuela de Fonoaudiología de la UV, Vanessa Kreisel.
Durante su presentación, la académica y también directora de capacitación de la Fundación Unión Autismo y Neurodiversidad (FUAN) se refirió principalmente a la neurodiversidad asociada a esta condición y al rol que cumplen los denominados “apoyos naturales” (compañeros de aula o de carrera) en el proceso destinado a favorecer la inclusión de los estudiantes neurodiversos.
Al respecto, Vanessa Kreissel explicó que en Chile la mayoría de los estudiantes universitarios con condición del espectro autista corresponde a jóvenes que presentan el nivel o grado 1 de esta condición y se caracterizan por enfrentar desafíos acotados en los ámbitos de la comunicación y la interacción social y cuyos intereses y comportamientos pueden causar ciertas interferencias en algunos contextos específicos, como en la planificación de actividades, trabajos o exámenes, por lo que su incorporación suele ser exitosa, pero no por ello carente desafíos.
“Asimismo, presentan grandes fortalezas. Hay estudiantes con una inteligencia normal o superior a la de sus pares, un buen nivel de lenguaje y amplio vocabulario, excepcionalmente con buena memoria mecánica, buena decodificación lectora y procesamiento visual de la información, con habilidades para la tecnología, ordenados, estructurados, sinceros, con pasión e intereses específicos, sin olvidar que cada persona será diferente a la otra y que dentro de este espectro hay una gran diversidad”, precisó la docente.
Durante el desarrollo de la sesión también intervinieron algunos estudiantes que presentan esta condición, lo que enriqueció el diálogo y las respuestas surgidas de las preguntas que muchos de los participantes realizaron a la especialista durante su presentación.
Ayuda necesaria
Vanessa Kreisel abordó, además, algunas consideraciones generales relacionadas con los desafíos sociales que la gran mayoría de los jóvenes con trastorno del espectro autista enfrenta en su etapa de transición a la vida universitaria.
Entre ellos mencionó la necesidad de tener que vivir o compartir espacios con personas extrañas al venir de otras regiones, hacerse de nuevos amigos, sociabilizar, organizar de nuevas maneras sus tiempos y mantener en paralelo la conexión con sus familiares.
“Hay que ser conscientes de que los estudiantes con condición del espectro autista que han llegado a la universidad vienen de una enseñanza obligatoria, en la cual muchos de ellos han sido víctimas de bullying, burlas y marginación en su entorno. Por esto, la universidad debe suponer un nuevo comienzo, a través de apoyos y concienciación de sus docentes y, en especial, de sus compañeras y compañeros, para que puedan ser excelentes estudiantes”, enfatizó la profesora.
En este sentido, Vanessa Kreisel definió el rol que deben jugar estos últimos como trascendental, considerando que son los apoyos naturales de los estudiantes con esta condición, tanto dentro como fuera de la sala de clases, y como agentes dedicados a promover la inclusión y la diversidad en la sociedad.
Las jornadas de capacitación sobre el espectro autista son trasmitidas en forma remota y según explicó la presidenta de la Comisión de Inclusión del CRUV, Carolina Pérez, reflejan la labor que este organismo realiza para favorecer la plena incorporación de los jóvenes a la vida universitaria.
La segunda sesión y final de esta actividad se realizará el miércoles 24 de noviembre y en ella participarán estudiantes de la UPLA y la USM.
Fuente: Consejo de Rectores de Valparaíso, CRUV.